Si bien en la temporada 80-81, era de nuevo el Calvo Sotelo quien le apeaba de la competición, la temporada siguiente lo hacía el Atlético Madrileño -filial del club rojiblanco- en la Segunda ronda. A sus 49 años, con una larga militancia en el club -llegó ocupar posiciones importantes en la Subcomisión de Fútbol- se considera capaz de conocer a todos los que han pasado por la hinchada y saber si, por ejemplo, se la bancan o no se la bancan.